La osteoporosis es una enfermedad que cursa con una disminución de la masa ósea y de la resistencia mecánica del hueso, que tiene como consecuencia el aumento de la probabilidad de sufrir fracturas. Es asintomática y con frecuencia su primera manifestación es una fractura, siendo las más frecuentes las de cadera y las vertebrales.Entre los numerosos factores que afectan a la masa ósea podemos considerar aquellos relacionados con la dieta, el estado gonadal y los hábitos y estilos de vida. El objetivo de este trabajo ha sido estudiar los posibles efectos de los factores biológicos, antropométricos, de actividad física y de ingesta de nutrientes sobre la salud ósea en mujeres postmenopáusicas. Se han estudiado un total de 335 mujeres postmenopáusicas de la Comunidad Autónoma de Extremadura (edad media 60.9±8.1 años). A todas ellas se les realizó una historia clínica completa que incluía factores antropométricos, biológicos, hábitos y estilos de vida, enfermedades y tratamientos farmacológicos. Se cuantificó la actividad física y la ingesta de nutrientes con un cuestionario dietético de siete días, ambos validados en la bibliografía internacional. La masa ósea fue valorada mediante medidas del ultrasonido óseo cuantitativo en falanges con un equipo DBM Sonic Bone Profiler de IGEA (Carpi, Italia), esta técnica se ha revelado eficaz para detectar cambios en la masa ósea, siendo además económicas, portátil y estar libres de radiaciones ionizantes.Los resultados obtenidos no revelan diferencias significativas en la masa ósea entre mujeres sedentarias y las que practican una actividad física moderada y las activas. En cuanto a la ingesta de nutrientes, las mujeres postmenopáusicas estudiadas muestran un exceso en la ingesta de fósforo, proteínas y selenio. La ingesta excesiva de selenio se confirma como un determinante negativo de la masa ósea en el grupo de mujeres cuya ingesta de calcio es menor de 800 mg/día; siendo la ingesta de calcio un determinante positivo de masa ósea en este mismo grupo. El efecto negativo de la ingesta excesiva de selenio sobre la masa ósea desaparece en el grupo de mujeres con una ingesta de calcio ajustada a las RDA.Todos estos hallazgos indicarían que la actividad física realizada de manera moderada no produce cambios sobre la masa ósea en mujeres postmenopáusicas. Mientras que la ingesta adecuada de calcio, es decir ajustada a las RDA, previene los efectos negativos sobre la masa ósea del consumo elevado de selenio y sería recomendable una ingesta adecuada de calcio, entre 800 y 1200 mg/día para prevenir la disminución de la masa ósea en mujeres postmenopáusicas.